sábado, 28 de junio de 2008

Mermelada de albaricoque

Una vez leída la entrada básica, podemos poner el albaricoque como ejemplo. Pongo como cantidad 1 kg. pero vosotros multiplicad por vuestro peso concreto las proporciones. A mi me gusta más con albaricoques de la variedad naranja.

1,5 kg de albaricoques maduros, 75o gr de azúcar, 2 limones.

Tener los frascos y los recipientes completamente limpios.


Lavar los albaricoques y dejarlos escurrir muy bien. Quitar el hueso y ponerlos en un puchero de fondo grueso con el zumo y la pulpa de los limones ( sin pepitas) a fuego vivo, moviéndolos para que no se peguen. Si nos gusta la fruta muy triturada pasaremos la batidora si preferimos trozos más gruesos utilizaremos el pasapurés con el rallo ( disco con agujeros) grueso o simplemente machacaremos la pulpa con la pala de mover. Coceremos hasta que todo este blando.

Pondremos la pulpa a cocer con el azúcar a fuego suave y vigilando frecuentemente pues es fácil que se agarre al fondo. Una vez que se haya evaporado la mayor parte del líquido y alcance el espesor que nos gusta, apagaremos el fuego.


Llenar los frascos todos a la vez, doblar un paño de cocina varias veces y golpear el fondo del frasco suavemente para eliminar las burbujas ( cuidado que no salpique), poner el film transparente y el tape.

En un puchero con 10 cm de agua, colocar los frascos procurando encajarlos bien ( podemos poner dos alturas), ahora cubrirlos bien de agua y llevar a ebullición 20 minutos. Las normas dicen que debería poner algo debajo para evitar el "tembleque" de los frascos y que no se rompan pero la verdad es que es un engorro y todavía no se me ha roto ninguno. En olla expres 8 minutos es suficiente.

Sacar los frascos del agua y dejar enfriar sobre un paño de cocina. Si tenemos varias tandas, aprovecharemos el agua ya caliente para cocer los siguientes. Con pinzas se sacan muy bien los frascos.

viernes, 27 de junio de 2008

Mermeladas

Hoy va de mermeladas. ya sé que no es algo que vosotros soléis estar interesados, pero es en lo que estoy enfrascada ( en el sentido literal de la palabra) en estos momentos debido a un exceso puntual de fruta.

Podemos distinguir entre mermelada y confitura. Mermelada la fruta está triturada confitura suele estar a trozos y normalmente se añade el azúcar como almíbar.

Como normas básicas podemos considerar:
- Lavaremos muy bien la fruta, dejándola escurrir bien.
- Las frutas tienen que estar maduras, no estropeadas y si tienen algo pasado de madurez, lo limpiaremos muy bien.
- Si la fruta tiene semillas, es conveniente pasarlas por el pasapurés antes de añadir el azúcar. Retendremos las semillas y pasará más fácil. Según que tipo de piel también la podemos eliminar así.
- Haremos la conserva sin interrupción, cuanto más deprisa hagamos el proceso completo, mejor conservaremos el sabor.
- Los mejores recipientes para cocer son de acero inoxidable muy limpios, grandes y a ser posible altos, para mover sin derrames.
- Para conservarlos utilizaremos frascos de cristal perfectamente limpios, con tape hermético en buen estado. Para asegurarnos el cierre, podemos poner un trozo de film de plástico de cocina.
- Si usamos utensilios de madera, tienen que ser exclusivamente para dulces, pues guardan sabores. Los de silicona son muy útiles.
- Llenaremos los frascos en caliente, golpeando la base, una vez lleno, sobre un paño para eliminar las burbujas de aire.
- En la esterilización, tienen que estar cubiertos de agua. 8 minutos en olla expres o 20 en olla normal es lo habitual.
- Las mermeladas tienen que llevar un mínimo de azúcar ( puede ser azúcar blanca, morena o fructosa para diabéticos) para su conservación. Algunos libros ponen 1 kg de azúcar por kilo de fruta limpia, mi paladar no resiste eso y según con que fruta con medio kilo es suficiente, con 700 gr suele ser del agrado de todos.
- Poner 2 limones por kilo de fruta, ayuda a la conservación además de ser reforzante del sabor y evitar oxidación y pérdida de color.

lunes, 16 de junio de 2008

Menu para cada día

Hace un tiempo, hice una entrada con ¿Que hago para comer?, hoy trato de dar ideas de menu lógicos y equilibrados para una comida. Pero como dije el otro día, planificarlos es un poco absurdo. Un día tienes tiempo y otro no, un día tienes sobras y otro te faltan cosas y tu despensa tiembla. Y casi nunca sabes las circunstancias que vas a tener a la hora de preparar la comida. Al menos yo estoy en ese caso.

Otra cuestión a considerar es si vamos a comer en casa o nos tenemos que llevar el "tuper" ( la palabra fiambrera me gusta más pero no sé si todos la entenderiais). La próxima entrada es comida para llevar.

Los platos únicos ahorran mucho tiempo y pueden ser completos. Tengo la etiqueta de plato único, aunque siempre recomiendo una ensalada ligera acompañando. Otros añadiendo un poco más de algún componente, normalmente protéico, será un plato completo. En españa no nos sentimos a gusto si solo comemos un plato aunque lleve de todo, es algo que podemos ir cambiando poco a poco.

Platos que pueden ser únicos: arroz de carne o pescado, pasta con carne, o pescado, legumbres, menestra con huevo frito, patatas o verdura guisadas con carne o pescado, carne guisada o en salsa acompañada de pasta o arroz. A veces prima el ingrediente protéico y otras el saciante, tiene que haber de los dos. Ensaladas con patata, arroz o pasta, también son una buena solución.

En una comida con dos platos, si ponemos una sopa o verdura de primero, el segundo ha de ser mas consistente, de digestión más lenta, que no quiere decir pesada. Tenemos que evitar sentir nuestro estómago rugir a mitad de tarde o noche. Las verduras si las hacemos con besamel, serán más saciantes y los no amantes de lo verde las tolerarán mejor, ( el otro día leí que el 15% de los escolares no había probado una naranja, no hablaré de los que no habían probado espinacas).

Podemos hacer algunas fichas con las comidas más apetecibles, y ojearlas en momentos de baja inspiración. Actualizando esta idea, también sirve dar un paseo por la red, pero una vez encontrada nuestra receta, copia o apunta dónde está, pues, con la misma búsqueda no siempre sale lo mismo. Yo he despistado varias recetas por no tener esta precaución.

La etiquetas 1º plato o 2º plato, a veces me olvido de ponerlas, otras veces no está bien definido el concepto y no lo pongo, pero si las combinais algo sale. Mirar la despensa o el congelador también ayuda. Para los próximos Reyes pediré a mi hado madrino informático un combinador aleatorio de platos para formar un menú, no se si existe.

Como último recurso siempre queda preguntar al de al lado ( que puedes ser tu mismo) ¿Que hago de comer ahora mismo?, ¿ que me apetece?, hay días que tienes antojos.

viernes, 13 de junio de 2008

Decálogo del emancipado

A veces una planificación para paliar la falta de planificación, es muy útil. Resulta más práctico pensar un día para poder no pensar el resto del periodo, que nosotros consideremos útil para espaciar la compra, puede ser una semana o un mes.

Primer mandamiento, la despensa es muy importante, no siempre se tiene tiempo-ganas de ir a comprar. Optimiza el tiempo y compra todo lo "seco" una vez al mes, si tienes donde guardar.

- Un buen congelador con mucha capacidad, nos ayudará siempre. Incluso, a veces, una visita de/a madre caritativa, llena los congeladores de sus hijos sobre todo de comida cocinada. Si no uno mismo, el día que cocina lo hace en doble o triple, prepara la ración diaria y tenemos comida lista varios días. Las madres actuales también trabajamos y somos "emancipadas" currantes. Lo único que nos diferencia son los años de experiencia.

- El congelador es bueno que tenga verdura, carne y pescado crudo y cocinado. En las recetas puedes mirar la palabra congelar. Esto es lo ideal, pero si un día sobra acelga con patata, que normalmente no congelo, y veo que no la voy a poder consumir, la empaqueto y al congelador, cuando la saco está aceptable. Lo mismo digo con el arroz o la pasta, aunque alguien me dice que lo hace yo me resisto.

- No tires una sobra. Congela. Lo que un día te puede parecer sobra, otro día te sabrá buenísimo. Además te evitará trabajo un día sin tiempo/ sin ganas.

- Cuelga un papel en la cocina para apuntar lo que queda poco y se puede acabar en el largo periodo de tiempo que no vas a ir a comprar. La memoria no funciona, no compras lo que debes y compras lo que ya tienes.

- De vuelta del trabajo, piensa en la fruta y la verdura esto es mejor comprarlo en el pequeño comercio, suele ser más barato y la calidad mejor pues en la elección de variedades de una fruta no primará que resista el tacto de montones de personas que prueban cada pieza para ver si está madura.

A partir de aquí sois vosotros los que podéis añadir experiencias e ideas.

jueves, 12 de junio de 2008

Pisto casero

El pisto era comida de primavera verano, cuando las hortalizas están en el huerto, ahora es de todo el año, aunque no con todo el sabor.

Alguna vez, lo he hecho en olla exprés, teniendo mucho cuidado con los tiempos pues puede acabar en puré fácilmente al más pequeño de los descuidos.

Yo le pongo una patata para que llene más el estómago y también une los sabores. El pisto, como casi todo, en cada casa es distinto. Si alguien tiene sugerencias serán bienvenidas.

Puede servir de plato o guarnición, tanto de carne como de pescado.

1 patata, 2 pimientos verdes, 1 cebolla, 1 calabacín, 2 tomates maduros, 1 cucharilla de azúcar, 25 gr de chorizo, aceite y sal. Opcional 2 ajos, una lata de atún o 2 huevos.

Pelar y partir la cebolla en trozos pequeños. Partir a rodajas el calabacín ( la mandolina vuelve a ser útil) y el pimiento verde. En un puchero de fondo grueso, poner dos cucharadas de aceite y la cebolla partida, el pimiento verde y el chorizo partido a trozos pequeños. Añadir el calabacín, dar unas vueltas, rehogar unos minutos a fuego fuerte,bajar el fuego y tapar, dejar 5 minutos. En este punto se puede congelar.














Pelar y partir la patata a trozos pequeños (lascas, o rodajas partidas en tres o cuatro trozos) y 1 cucharilla de sal. Añadir al puchero, mover y tapar. Dejar 10 minutos.















Partir el tomate lavado a cuadritos, subir el fuego y añadirlo. Dar unas vueltas y cocer 5 minutos más. Añadir el azúcar y probar la sal y el punto de cocción de la patata. El tomate natural se puede sustituir por 4 cucharadas de salsa de tomate.

Opción 1: Incorporar 1 lata de atún, a mi me gusta más en escabeche o al natural pero que sea a vuestro gusto.

Opción 2: Batir los huevos y justo en el momento de servir, calentar el pisto y añadir el batido, apagar el fuego, dando unas vueltas y servir sin terminar de cuajar, lo hará con el calor residual

lunes, 9 de junio de 2008

Champiñones con queso

Hoy vamos de algo bueno y sencillo, es mas bien una guarnición o aperitivo que no da trabajo, pero si ponemos una buena cantidad, servirá de primer plato. Se puede hacer a la plancha o al horno, a la plancha requiere más aceite y por lo tanto calorías. Si usamos un queso no graso, pero que sirva para fundir, tendremos algo muy agradable muy bajo en calorías que alegrará un periodo de racionamiento, estamos en la época de penurias ante el espejo.

Como ya es habitual en mi os ruego no usar tranchetes o queso basura parecido.

12 champiñones, 50 gr de queso que funda bien, aceite y sal.

Si los champiñones son de los que venden con la raiz, limpiarlos. Si son de los que venden con el pie limpio, solo pasarles un paño húmedo.

Encender el horno con la resistencia superior a 200º. Una vez limpios, quitar el pie haciendo un poco de fuerza lateral y se separará sin problemas. Guardar los pies para otros usos (revueltos, añadir a carnes o simplemente salteados y servidos a la vez). Colocar los champiñones con las láminas hacia arriba en una fuente de horno. Partir el queso o desmenuzarlo si se puede, poniendo una pequeña cantidad dentro del champiñón, echarles unas gotas de aceite y meterlos al horno 5 minutos. servir inmediatamente.

Si los vais a hacer a la plancha, calentar una sartén, añadir un poco de aceite, ponerlos sin rellenar con las láminas hacia abajo, sacarlos, rellenar con el queso y luego terminarlos de hacer en el momento de servir con las láminas y el relleno hacia arriba.

Como siempre, las variaciones del relleno quedan a vuestra imaginación: cebolla frita, calabacín salteado, puerro..... El tipo de queso marcará el sabor final, los muy fuertes apagan el sabor del champiñón.

lunes, 2 de junio de 2008

Paquetitos de calabacín

Los probé ayer en un sitio de menú del día, por supuesto no pedí la receta pero es fácil de deducir. Hoy los he hecho en casa ( con alguna modificación) y han quedado estupendos. De verdad que para dos, cuesta menos de 30 minutos, me he controlado el tiempo.

El relleno como siempre, a vuestra imaginación, aprovechamiento de sobras incluidas, tanto de carne como de pescado o vegetales.

La clase de queso influirá de manera notable en el sabor final, por lo tanto elegidlo muy bien a vuestro gusto.

1 calabacín de unos 300 gr, 50 gr de carne picada, 1 cucharilla de harina, 50 ml de vino blanco, 1 hoja de laurel, 1 cebolla, 50 gr de queso.

Partir el calabacín longitudinalmente con un grosor de unos 2 mm, se hace muy bien con la mandolina. Poner 1 cucharada de aceite en una sartén amplia y colocar las rodajas a fuego medio 1 minuto por cada lado. Esto es para ablandar el calabacín, si queréis, un poco menos grado, también se pueden escaldar en agua hirviendo un par de minutos. Sacar y reservar en un plato.

En la misma sartén, saltear la cebolla partida a trozos pequeños, cuando este transparente, retirar la mitad. Saltear la carne y el laurel con el resto de la cebolla a fuego vivo hasta que justo cambie de color, añadir la harina, dar unas vueltas y echar el vino, mezclar. Cocer a fuego lento 5 minutos.

Extender una lámina de calabacín en la tabla de cortar, poner encima una cucharilla de carne y un poco de queso y enrollar, con cuidado. Coger otra lámina, colocar en sentido contrario y enrollar el paquete anterior de manera que queden cerrados los laterales. Poner en una fuente de horno. Hacer todos los paquetes y espolvorear de queso rallado. Meter al horno a 150 ºC, 10 minutos. Servir sobre la cebolla que hemos guardado. Esto también puede servir como tapa o aperitivo antes de la comida.