viernes, 8 de junio de 2007

Economía ambiental y personal

Hoy no va de cocina, me han tocado mi fibra sensible. Os toca economía ambiental.

Nunca se me había ocurrido que tuviera nombre. Resulta que hacer un pequeño gesto por nuestro entorno se llama ecomeme. Si cada uno adoptamos uno, dejará de ser un pequeño gesto para pasar a se grande.

El mío particular es no coger bolsas en las tiendas. Llevo mi propia bolsa de tela plegada en el bolso y la uso todos los días. Si se me ha olvidado, procuro llenar todo lo posible las que uso y usarlas después para la basura. Las que rechazo sistemáticamente son las muy pequeñas que no sirven para nada, tipo las de farmacia.

Cuando voy de compra textil, cojo una en la primera tienda, si la mía no es apropiada, y luego en ella pongo lo de todas las tiendas. El reuso de estas es para transportar el papel para reciclar ( las recupero y vuelvo a usar hasta que se rompen).

Respecto a si estos pequeños gestos son útiles, en alguna parte leí un cuento que más o menos resumo: Hubo una ola gigante que llenó la playa de peces. Cuando se retiró, dos hombres fueron a la playa, uno miraba los peces, el otro los recogía y devolvía al mar. El que miraba, le dijo, ¿no crees que es inútil lo que haces? hay muchísimos no vas a poder salvarlos, el que recogía lo miró y dijo, a la vez que devolvía peces al mar, " para estos si es importante".

Lo mismo sucede con los ecomemes, esto sí lo puedo hacer. Y sirve.

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